En apenas 1 minuto y 18 segundos, el joven texano Floyd “Kid Austin” Schofield (19-0, 13 KO) resolvió su combate ante el veterano Tevin Farmer (33-9-1, 8 KO) con una contundencia que dejó sin aliento al público del Honda Center de Anaheim.
Schofield, de 22 años, no dio margen a la especulación. Desde el primer segundo salió con agresividad quirúrgica, conectando un derechazo al mentón que envió a Farmer a la lona. El excampeón mundial de las 130 libras se levantó, pero apenas tuvo tiempo de reaccionar antes de recibir otra combinación que lo volvió a derribar.
Con las piernas tambaleantes, Farmer intentó resistir, pero una ráfaga de cuatro golpes al rostro terminó por sellar el destino. El árbitro detuvo el combate sin necesidad de conteo adicional. Fue un nocaut técnico que no dejó dudas: Schofield está listo para los grandes nombres del peso ligero.
“Me quité un peso de encima”, declaró emocionado el invicto tras el combate. Su regreso al ring marcó un punto de inflexión, luego de la cancelación de su pelea ante Shakur Stevenson en febrero, en Arabia Saudita, por un presunto envenenamiento.
El promotor Oscar De La Hoya no ocultó su entusiasmo: “Acaban de ver al futuro de las 135 libras”. Schofield, clasificado número 2 por la AMB.
Farmer, por su parte, sufrió su cuarta derrota consecutiva, aunque su legado como estilista y excampeón sigue intacto.
En Anaheim, el mensaje fue claro: «Kid Austin» ha vuelto. Y no vino a esperar su turno. Vino a tomarlo por asalto.