A tambor batiente es una expresión que se emplea para significar que algo se logra “de manera aguerrida, triunfalmente o con gran pompa”, definición que bien encaja para ensalzar al imbatido peleador japonés Naoya Inoue, ya 4 veces campeón del mundo-minimosca, supermosca y gallo las tres primeras- en una carrera profesional iniciada en octubre de 2012 y desde el pasado martes 26 el monarca indiscutido supergallo, 122 libras o 53,338 kilos, cetro logrado con una rotunda victoria en 10 asaltos sobre el filipino Marlon Tapales, que defendía sus fajas AMB y FIB.
La pelea se montó en la Arena Ariake, en el distrito de ese nombre en las vecindades de Tokio, con capacidad para 15 mil personas y que fue copado casi totalmente en la ocasión por una mayoría de aficionados locales que vieron y auparon al “Monstruo” demoler implacablemente a un guapo oponente, que ofreció una tenaz resistencia a lo largo de las diez vueltas que duró, hasta que una derecha del ídolo local, al parietal, lo llevó a la lona, de la que no pudo levantarse sino luego de recibir la cuenta de los diez segundos.
Antes del final, iteramos, Tapales nunca desmereció y en varios pasajes del combate obligó a Inoue a dar su mejor esfuerzo en un pleito que deparó intensas emociones en la mayoría de los diez tramos, que fueron de recios y constantes intercambios de golpes.
Para Inoue el triunfo fue el 26° que logra y su KO 23 en total desde su debut ante el filipino Crison Omayao, a quien liquidó el 2-10-12 en el estreno en el 4° asalto de 8 programados. En el camino seguido desde entonces los únicos que han terminado la distancia de pie frente al púgil de 30 años de edad son su paisano Riochi Taguchi, el mexicano David Carmona y el filipino Nonito Donaire, al que noqueó en un segundo choque. Tapales, de 31 años, bajó del ring con una marca de 37-4-0, 19 KOS propinados y 3 en contra.
Inoue, que bien merece los adjetivos calificativos positivos de excepcional, fabuloso, espectacular, asombroso y cuantos otros se les ocurra a los lectores, solo efectuó dos peleas este año que está por terminar. El 25 del pasado julio despachó en 8 al estadounidense Stephen Fulton para ganar los fajines supergallo del Consejo y de la Organización Mundial del Consejo. Fulton subió imbatido en 21 peleas, pero Inoue resultó demasiado enemigo para él.
Inoue, nacido en Zama, Kanagawa, ocupa actualmente la segunda posición del Libra por Libra (LXL), ranking no oficial para los organismos que controlan el boxeo, a la zaga del soberano welter Terence Crawford. Son miles, millones de aficionados, no obstante, los que piensan que el nipón, a quien ya se le considera el mejor boxeador en la historia de la disciplina en su país, debería estar en el tope de dicha clasificación y se cree que no se le otorga el puesto cimero por ser militante de una de las categorías llamadas chicas.
