Este sábado 29 de marzo, el mundo del boxeo se prepara para una electrizante noche de acción, donde el campeón mundial unificado del peso mínimo, Óscar Collazo, defenderá sus títulos mundiales Super WBA y WBO peso mínimo frente al retador mexicano Edwin Cano. El Poliforum Benito Juárez, en Cancún, México, será el escenario de esta esperada contienda, cargada de talento, ambición y promesas de emociones inolvidables. 

Óscar Collazo, conocido como “El Pupilo”, llega a este combate con un impecable récord de 11 victorias sin derrotas, incluyendo ocho nocauts. El puertorriqueño ha emergido como una de las estrellas ascendentes más brillantes de su división, respaldado por un estilo técnico que lo ha llevado a la cima del boxeo mundial. Tras conquistar y unificar los títulos, Collazo ha demostrado ser un campeón completo, capaz de dominar el arte del ring con precisión y determinación. 

Por otro lado, Edwin Cano, con un récord profesional de 13-2-1 y cuatro nocauts, representa una amenaza real para el campeón. Aunque Cano no es el favorito en las apuestas, el mexicano ha trabajado arduamente para aprovechar esta oportunidad única en su carrera. Viene de una racha de victorias que ha elevado su confianza, y como se sabe en el mundo del boxeo, no hay nada más peligroso que un hombre motivado que lo tiene todo por ganar. 

La preparación de ambos peleadores ha sido rigurosa. Collazo ha completado más de 100 asaltos de guanteo, perfeccionando cada detalle de su estrategia. Mientras tanto, Cano ha hecho ajustes clave en su entrenamiento, enfocándose en la velocidad y la resistencia para contrarrestar el estilo metódico de su oponente. 

Esta pelea no solo es una batalla por los cinturones, sino también una lucha de estilos y personalidades. Collazo, con su técnica refinada, buscará mantener el control del combate desde la media distancia, utilizando su jab como arma principal para desgastar al retador. Cano, por su parte, podría intentar acortar la distancia, presionando agresivamente y forzando intercambios para buscar una sorpresa. 

El contexto tampoco puede ser ignorado. Pelear en territorio mexicano ofrece a Cano el apoyo del público local, un factor intangible que a menudo influye en las peleas cerradas. Sin embargo, Collazo ha demostrado ser inmune a la presión de pelear fuera de casa, confiando en su talento y experiencia.