Callum Smith llegó por la puerta grande a las filas del organismo pionero, la Asociación Mundial de Boxeo. El británico aprovechó la final de la World Boxing Super Series en peso Supermediano para conquistar el súper campeonato negro y oro, y apuntarse desde ese momento como uno de los líderes en la categoría y la Revelación del Año.

El de Liverpool, Inglaterra, enfrentó al monarca de la AMB, George Groves, el 28 de septiembre de 2018 en una sui generis gala realizada en el King Abdullah Sports City de Jeddah, Arabia Saudita, para disputar el cetro de las 168 libras y el Trofeo Muhammad Ali que se otorga al campeón de la exitosa WBSS.

Y a pesar de los pronósticos en contra, pues ya Groves había mostrado meses atrás su potencial ante el también británico Chris Eubank Jr. al final fue Callum quien alcanzó la gloria al noquearlo en siete episodios para alcanzar la cima de la manera más espectacular posible y consagrarse como el mejor de las 168 libras.

Con la victoria en territorio árabe, el inglés Smith volvió a casa por la puerta grande después de haberse consagrado como el súper campeón de la AMB y como el enemigo a vencer en una categoría que está cada vez más candente por el ascenso de Canelo Álvarez a la misma después de haber derrotado al monarca regular, Rocky Fielding, hace unos días.

Callum, de 28 años y ahora con marca profesional de 25-0 y 18 nocauts, es reconocido por la AMB como la Revelación del Año, status que hace honor precisamente a su oportuna llegada a la máxima escena internacional, teniendo como marco la final del histórico torneo que fue la WBSS en su primera temporada y nos ofreció en peso Crucero al Boxeador del Año, Oleksandr Usyk.

Con esta victoria, el también campeón europeo y británico se unió a su hermano Liam como campeones del mundo, ya que su hermano fue monarca de las 154 libras, y ahora él es titular de las 168 libras, y además con promesa de hacer grandes cosas en el futuro.