Byron Rojas, nuevo campeón mundial peso mínimo de la Asociación Mundial de Boxeo, recibió este miércoles su cinturón negro-oro de la mano del primer vicepresidente de la AMB Renzo Bagnariol.

“Estoy muy agradecido por la oportunidad y de ahora en adelante voy a trabajar mucho más duro”, manifestó el campeón centroamericano a los medios de comunicación presentes en el acto.

Rojas, quien obtuvo su cinto tras vencer por decisión unánime a Heikkie Budler, es un muchacho acostumbrado a esforzarse cada día por lograr sus metas, no sólo las boxísticas, pues “El Gallito”, como se le conoce, se levanta a correr todos los días a las 4 de la mañana para mantenerse en forma.

Después, toma un autobús desde Pueblo Nuevo, ubicado sobre una montaña, y recorre 80 kilómetros hasta Matagalpa, capital del Departamento de Matagalpa al noreste de Nicaragua, para asistir a la universidad donde estudia tercer año de veterinaria.

No obstante, su día no termina aquí, luego de recibir clases va al gimnasio, donde con cada golpe forjó su sueño de ser campeón del mundo y en la noche toma el autobús, nuevamente recorre 80 kilómetros hasta Pueblo Nuevo para volver a empezar a correr a la mañana siguiente a las 4 de la mañana.

Ahora, luego de obtener su primer objetivo y ver su esfuerzo recompensado afirmó emocionado: “descansaré una semana y volveré al gimnasio”. Así retomará la rutina, pero el sabor será distinto, sobre todo en las noches porque “ahora voy a dormir con mi cinturón”, dijo el nuevo campeón.